Ahora es el momento, eslogan que hemos querido emplear desde nuestra formación política, Independientes de Rafelbuñol, IdRa, para empezar este nuevo rumbo en la política de Rafelbuñol. Ahora es el momento de demostrar que él todo vale, sin tener en cuenta las consecuencias que conlleva a los ciudadanos, es una política obsoleta, de políticos que no quieren ver, ni oír las realidades de la calle. Tenemos un ayuntamiento en Rafelbuñol
gobernado por el PP, a través de señores como el Sr. Jaime García, Eduardo Ovejero o Miguel Saborit, entre otros, que posiblemente, tuvieron su momento de gloria, pero que no supieron o quisieron gestionar adecuadamente, consecuencias que nos está haciendo sufrir a los vecinos de la localidad.
-Gestión municipal, que está provocando en nuestras empresas municipales, situaciones muy críticas, y que están repercutiendo directamente en los contratos de trabajo de sus empleados.
-Gestión urbanística, que llevaron también al despropósito sin sentido, en la apertura de nuevas zonas como el PAI IV, y que han provocado situaciones económicas complicadas, en muchas familias de la localidad. ¿ Cómo es posible, vecinos de Rafelbuñol, que gobernantes con tantísima experiencia política, como el Sr. Jaime García, no se diera o quisiera dar cuenta, de la situación que muchos economistas estaban vaticinando, y haber demorado la realización de este PAI?. ¿Por qué Sr. Jaime?. Personalmente entiendo que ninguna circunstancia por atractiva que pueda ser, pueda superar el bien común de los vecinos que usted gobierna.
- Una Gestión Laboral, que no cree en la pluralidad a la hora de acceder al empleo municipal, basada en el amiguismo y más amiguismo, en la adjudicación de puestos de trabajo, sin tener en cuenta la preparación, y las necesidades de muchas familias de nuestra localidad, en donde todos o parte de sus miembros están desempleados. Familias o personas que lo único que les hace diferentes de los demás es no ser amigo o amiga de …
-Una Gestión económica, que ha conducido con su despilfarro, a un ayuntamiento, con un déficit y un grado de endeudamiento muy alarmante. Que nos convierte, por desgracia, en uno de los municipios con más grado de endeudamiento de la provincia de Valencia. Paradójico cuando venimos de una época dorada, que aportó un gran caudal de ingresos en las arcas de nuestro ayuntamiento.
Finalmente, gestión legal, que por motivos incomprensibles, y sin argumentos sólidos, nos han condenado a todos los vecinos de Rafelbuñol, de forma indirecta y sin haber hecho nada ilícito, a tener que pagar con nuestros impuestos las desavenencias de nuestro ayuntamiento con algunas familias de la localidad y que condenan a nuestro gobierno. Sentencias que en algunos casos, alcanzan el millón y medio de Euros y que acrecentaran más si cabe el agujero económico de nuestras arcas municipales.